lunes, 29 de diciembre de 2014

Francesca




«Me di cuenta de la nada con la que había llenado mi vida»

Ex adepta del grupo destructivo Cienciología, fundado por Ronald Hubbard

MILAN, 7 abril (ZENIT.org).- «Conocí Cienciología en los años ochenta en Milán. Tenía 30 años y estaba separada y con un hijo. Trabajaba pero estaba insatisfecha e inquieta. Aparte del matrimonio, mi vida me parecía un fracaso. Un día me encontré entre las manos una hoja publicitaria que invitaba a "conocerse a sí mismo". Fui a hacer un test con 200 preguntas. Al final, me dijeron que era inestable e infeliz porque no podía expresar todo mi potencial».

Así comienza la aventura de diez años que pasó Francesca en Cienciología. Un grupo que en algunos países del mundo disfruta del reconocimiento como nueva religión y de la exención de impuestos. Con el mismo colaboran personajes como John Travolta. La ha revelado ahora al diario italiano «Avvenire».

Francesca ha salido hace tiempo de Cienciología. Cuenta con serenidad la experiencia. «Tras veinte lecciones sobre "anatomía de la mente humana" se me acercaron personas que me contaron cómo la Cienciología había cambiado 
sus vidas mejorándolas y me invitaron a hacer más cursos. Aprendí que era un "tethan", un ser actuante y consciente pero a causa de mis "aberraciones" (es decir los traumas de mi vida) estaba atrapada en un cuerpo y había perdido conciencia. Mi existencia estaba constituida por una cadena interminable de vidas precedentes, en las que había seguido perdiendo conciencia. Ahora, sin embargo, gracias a Cienciología, podía salir de esta espiral para alcanzar la libertad total. Esta perspectiva de libertad, de dominio sobre la realidad, me fascinó. Además, practicar Cienciología no era abrazar ciegamente una creencia sino seguir un método científico probado por muchos con éxito. Este no ser una fe sino una ciencia me daba seguridad».

A Francesca le dijeron que el mejoramiento le vendría través de una serie de grados en el Puente o Camino hacia la felicidad. Cada grado es un nuevo curso y nuevos dineros que hay que pagar ala organización. «Hay una técnica 
para todo y un coste para cada técnica, coste que sube a medida que se avanza por el Puente».

Tras algunos meses, Francesca decide que esto es lo más importante de su vida, abandona el trabajo y confía su hijo a una pariente. Entra en la organización de la Cienciología donde la hacen trabajar 12 ó 15 horas al 
día por muy poco dinero. No se preocupa porque tiene el dinero de la liquidación y además, piensa «dentro de poco seré tan capaz y libre que podré hacer lo que quiera».

Pero las cosas no van como había pensado. Cuando llega a la condición de «claro» (un nivel de conciencia y libertad capaz de hacer a la persona autónoma) experimenta una gran alegría que le dura poco: «me parecía en realidad estar exactamente como en el punto de partida. Yo me decía que en los niveles superiores resolvería mis problemas pero siempre se va adelante y el Puente no acaba nunca».

En aquel momento debía ir a Copenhague para pasar el nivel OT3, llamado el «muro de fuego». «Trabajé muchísimo para lograr mi nivel OT3 aunque cada vez más me parecía ciencia ficción y no ciencia. Pero estaba ha habituada a pensar poco y a fiarme totalmente de los escritos de Hubbard. Volví a casa y no olvidaré aquel viaje porque empecé a tener perturbaciones mentales que antes no había tenido nunca: sentido de asfixia, pánico, incapacidad de mantener el control de mi conciencia. Luego he sabido que otros tuvieron perturbaciones semejantes al acabar el OT3».

Al llegar a Italia, se sentía cada vez más fuera de la realidad: «creía que habría sido libre y en cambio me encontraba incapaz de resolver las cosas más banales de mi vida cotidiana. Mientras tanto, tras cinco años, el dinero de la liquidación se había acabado y yo no podía hacerme cargo de mi hijo. Decidí salir pero no fue fácil. Me hicieron acusaciones de todo tipo, intentos de hacerme confesar cosas que no había hecho, la amenaza (para mí gravísima) de no poder practicar nunca más la Cienciología por toda la eternidad (por tanto me negaban la vida eterna). Me dijeron incluso que usarían todo lo que dije en las sesiones de "auditing" (una especie de confesión ante un rudimentario detector de mentiras llamado "E-meter") sería publicado. Mientras tanto, me llamaban por teléfono muy amables diciéndome que yo era tan estupenda que justamente ahora no podía abandonar. Me fui durante algún tiempo a un lugar escondido porque me sentía acosada».

La conclusión de Francesca es elocuente: «Se entra en Cienciología para autorrealizarse y uno se convierte en completamente dependiente de esta "ciencia". Para entrar en la organización avanzada, yo había firmado un contrato de dos mil millones de años: estaba completamente fuera de la realidad. La noche en que cumplí 40 años, me di cuenta de la nada con la que había llenado mi vida. ¿Y mi hijo, y mi trabajo? Con un terror mezclado con alegría, comprendí que tenía que comenzar todo desde el principio»

¿Cómo hay que decirle a Dios: Jehová o Yahvéh?




Responde el P. Miguel Ángel Fuentes, I.V.E. 

Pregunta:

Primeramente mis saludos respetuosos y mi agradecimiento por estar abiertos a nuestras preguntas. Me gustaría saber porque algunas Bíblias le dan el nombre a Dios Padre, Jehová y en otras Yahvé. Gracias por su atención. Dios los bendiga ESTHER 

Respuesta: 

Estimada: 

El término Yahveh, es el término bíblico que aparece en Exodo 3,14. 'Jehová', en realidad, no aparece nunca en los textos bíblicos originales... Si, no es una exageración. Se trata del nombre del Dios de los hebreos trascrito erróneamente del texto hebreo masorético. La palabra original consta de las consonantes JHVH o JHWH (también conocidas como tetragrámaton) intercaladas con las vocales de una palabra separada, Adonai (Señor). Debido a que el hebreo antiguo no disponía, a diferencia del actual, de un sistema de representación de sus sonidos vocálicos, sus vocales originales son cuestión de especulación.A consecuencia de una interpretación de textos como Éxodo 20:7 y Levítico 24:11, el nombre vino a ser demasiado sagrado para pronunciarlo; los escribas, al leer en voz alta, preferían decir 'Señor' y por consiguiente escribieron las vocales de 'Señor' (Adonai) en el armazón de las consonantes JHVH como un recordatorio a los lectores futuros. Los traductores del hebreo, sin darse cuenta de lo que los escribas habían hecho, creyeron que las vocales de la palabra introducida por los escribas pertenecían al nombre de su Dios en lugar de ser nada más que un recordatorio de la necesidad de no pronunciar la palabra sagrada. Este es el origen del término Jehová o Jehovah. La evidencia de los Padres de la iglesia griega da pruebas de que las formas Jabe y Jao eran corrientes, así como formas acortadas hebreas como las palabras Jah (ver Salmo 68: 4, por ejemplo) y Jahu (en nombres propios). Todo esto indica que originalmente el nombre debió pronunciarse Yavé o Yaveh (modernamente a menudo deletreado Yahweh). Etimológicamente, es la tercera persona del singular, probablemente del verbo hawah o hajah, que significa 'estar.' Los intérpretes más antiguos explican el verbo en un sentido metafísico y abstracto; el 'estoy' de la Escritura es 'Él que está,' el completamente existente. Indudablemente Charles Taze Russell, el fundador de los autodenominados Testigos de Jehová en 1872, desconocía este hecho, lo que le llevó a hacer un énfasis absurdo en la palabra Jehová, considerando su uso como distintivo de la nueva religión, que según él, sería la única en dirigirse constantemente a Dios mediante su verdadero nombre. 

¿Qué enseña la teología sobre el ángel de la guarda?


Responde el P. Miguel Ángel Fuentes, I.V.E. 

Pregunta:

Cuando uno muere y su alma esta en el purgatorio allí también lo acompaña su ángel de la guarda o sólo éste está presente sólo cuando uno esta vivo. ¿Qué opinión tiene la doctrina católica al respecto? 

Respuesta: 

Estimado: 

Como principales efectos de la guarda de nuestros ángeles custodios se enumeran los siguientes: 

a) Los ángeles custodios libran constantemente a sus protegidos de innumerables males y peligros, así del alma como del cuerpo: Que el ángel que me ha librado de todo mal -dijo Israel a su hijo José- bendiga a éstos niños (Gn 48,16). 

b) Contienen a los demonios para que no nos hagan todo el mal que ellos desearían hacernos : recuérdese la historia de Tobías. 

Excitan de continuo en nuestras almas pensamientos santos y consejos saludables (Gen 16 y 18; Act 5.8.10). 

c) Ponen ante Dios nuestras oraciones, no porque Dios, omnisciente, necesite de esto para conocerlas, sino para que las oiga benignamente, e imploran por sí mismos los auxilios divinos que nos ven necesitar, cuando a lo mejor nosotros ni siquiera percibimos que necesitamos o que recibimos tales auxilios (cf. Tob 3 y 12; Act 10). 

d) Iluminan nuestros entendimientos, proporcionándonos las verdades de modo más fácil de comprender mediante el influjo que pueden ejercer directamente en nuestros sentidos interiores y exteriores. 

e) Nos asisten particularmente en la hora de la muerte, cuando más lo necesitamos. 

f) Es opinión piadosa de los teólogos que los ángeles custodios respectivos acompañan las almas de sus protegidos o custodiados al purgatorio o al cielo después que éstos mueren, como acompañaban las de los antiguos patriarcas al seno de Abraham; efectivamente, en la recomendación del alma después de la muerte de los fieles cantaba la Iglesia: 'Salid a su encuentro, ángeles del Señor, recibiendo su alma, poniéndola en presencia del Altísimo...; que los ángeles te lleven al seno de Abraham'. 

g) Créese también piadosamente que los ángeles custodios atienden las oraciones suplicatorias dirigidas por los fieles a las almas de sus custodiados cuando éstas se encuentran todavía en el purgatorio 'en estado no de socorrer, sino de ser socorridas; de hecho, las súplicas hechas a las almas del purgatorio se dice que son de las más efectivas. 

h) Por último, acompañarán eternamente en el cielo a sus custodiados que consigan la salvación 'no para protegerlos, sino para reinar con ellos' y 'para ejercer sobre ellos algunos ministerios de iluminación'. 

ADIVINOS Y PROFETAS DE HOY




Abelardo Hernández

Introducción 

Hemos sostenido en la Sociedad EVC -y de ahí nuestro lema "INSTRUCCIÓN RELIGIOSA Y EUCARISTÍA"- que la falla principal del católico mexicano es la ignorancia religiosa. No solamente muchos católicos han apostatado de la Fe de los Apóstoles y se han adherido a múltiples iglesias y sectas protestantes, sino que vemos por todos lados los efectos de la corrupción que envenena nuestra sociedad. Y a todo esto se añade un fenómeno que en pleno tercer milenio debería haber sido superado hace siglos. Siguiendo el viejo dicho de que "el que no conoce a Dios, ante cualquier palo se hinca", proliferan ahora creencias y actitudes que un católico instruido considera absurdas. 

En el número 4 del año 17 de la revista MUY INTERESANTE, el mes de abril de 2000 fue publicado un artículo escrito por Don. Abelardo Hernández con el título. "TESTIGOS DEL FUTURO" que aborda el tema de los que pretenden adivinar o predecir el futuro, tanto de la humanidad como de cada uno de nosotros. 

La Sociedad EVC, con el permiso de la Editorial Televisa presenta a sus asiduos lectores dicho artículo por considerarlo en realidad MUY INTERESANTE, bien documentado y no exento de sentido del humor. Han sido incluidos algunos subtítulos para hacer la lectura más fácil. 

TESTIGOS DEL FUTURO 

Más de la mitad de la población mexicana cree que su destino está en alguna parte. Así no es de extrañar que en este país proliferen tantos adivinos y profetas. 

Busca en la India. 

Si quieres conocer tu futuro, incluso la fecha de tu muerte, no tienes más que rastrear las doce Bibliotecas del Destino que existen en la India. En ellas se custodian cientos de miles de hojas de palma donde se supone que están codificados, en trazos minúsculos de una escritura con 5,000 años de antigüedad, los destinos vitales de todos los habitantes de la Tierra. Lógicamente, la interpretación de estos textos arcanos no está al alcance de cualquiera, sino que se trata de una sabiduría que pasa de padres a hijos desde hace generaciones. Cómo identifican estos iniciados la hoja de palma que corresponde a una persona en concreto, forma parte del secreto. 

Futurólogos fallidos. 

También existen adivinos cuyas predicciones afectan a toda la humanidad. El pasado 11 de agosto del 99, una bola de fuego -que posteriormente se identificó con la estación orbital MIR- caería sobre París causando millones de muertos. La declaración del modisto de origen español Paco Rabanne el verano anterior constituyó un perfecto ejemplo de profecía apocalíptica. Sobre todo porque, como todas, no se cumplió. Unos cientos de personas pertenecientes a la asociación Mierda para el Apocalipsis gritaron al día siguiente sus burlas ante las puertas de su establecimiento parisino... La MIR continuó en órbita y el mundo siguió rodando aquí abajo. 
Nadie sabe por qué el fallido profeta hizo coincidir su vaticinio con el suceso astronómico más popular de 1999: el eclipse solar del 11 de agosto. "No se han encontrado evidencias científicas de que exista ninguna relación entre los eclipses y las catástrofes naturales", aseguró en un comunicado el gobierno de México. Y no fue una declaración oficial gratuita. Existía un miedo disculpable porque en México se había producido un terremoto el 15 de junio, y otro el 31 de septiembre, seguidos por tremendas inundaciones que casi sepultan el país en una ciénaga de agua y barro. Y como en muchas partes del mundo, el eclipse había desatado de nuevo los terrores milenaristas. 

Como si quisiera darles la razón a los profetas que vaticinaban el fin del mundo, este pasado año hubo grandes terremotos en Turquía, Atenas y Taiwan. Son manifestaciones que utiliza la Tierra para demostrar que es un planeta geológicamente vivo. Pero tampoco precedieron al fin del mundo. 
Otro temor apocalíptico vino de los bombardeos de la OTAN sobre las tropas serbias en Bosnia. Cuando el presidente ruso, Boris Yeltsin amenazó con enfrentarse a la Alianza Atlántica, los fantasmas de la guerra se levantaron para recordarnos que el primer conflicto mundial que asoló Europa también comenzó en los Balcanes. Pero tampoco. La situación dista mucho de haberse resuelto y, sin embargo, el riesgo de una guerra nuclear -para muchos, la única causa que podría provocar el fin del mundo- se alejó de nuevo. 

¿Qué hay de Nostradamus y San Malaquías? 

Para justificar que se encendieran las alarmas, algunos echaron mano del pobre Nostradamus, que nunca pasa de moda. "En el año 1999, séptimo mes, del cielo llegará un gran rey del terror..." ¿Se estaba refiriendo con ese séptimo mes a julio? Y...¿hablaba del eclipse, de un cometa o de un meteorito? 
Nadie lo sabe, porque, como todas las profecías, las de Nostradamus fueron lo suficientemente ambiguas como para admitir cualquier interpretación. Pero si las profecías pretenden ser advertencias, ¿por qué no son tan claras como para que todo el mundo pueda comprenderlas? 
Otro miembro del club de los profetas muertos es el buen San Malaquías. En 1595, el monje benedictino Arnold de Wyon publicó la obra Lignum Vitae ornamentum et decus Ecclesiae, donde incluye 111 temas correspondientes a otros tantos Papas, que pasarán a la posteridad. Según ese listado, además del actual, Juan Pablo II, sólo queda por llegar un Pontífice más al trono del Vaticano, tiempo en el cual "la ciudad de las siete colinas" (¿Roma?) será destruida y el mundo juzgado". Bueno, mucho tendrían que precipitarse los acontecimientos para que el Apocalipsis suceda en este año. 

El peligro de los tres ceros. 

Por increíble que parezca, el repetido fracaso de los profetas no ha mermado la credulidad de sus seguidores. Ya en la última noche del año 999, las iglesias de Europa se encontraban llenas de fieles arrepentidos que lloraban mientras confesaban sus pecados. Muchos creyentes incluso se suicidaron. Algo mejoramos en 1999, pues que se sepa tan sólo siete personas prefirieron autoinmolarse ante los terrores suscitados por el famoso eclipse. Aún así, son demasiados. 

Seudo profetas seudo bíblicos. 

Acaso no lo habrían hecho si hubieran recordado algunas de las profecías apocalípticas más famosas que tuvieron lugar el siglo XIX. Entre ellas, la protagonizada por un pastor bautista llamado William Miller, que a partir de 1818 examina la Biblia y realiza ciertos cálculos que le llevan a predecir el regreso de Jesucristo a la Tierra, y con ello el comienzo del Juicio Final, para el 21 de marzo de 1843. Como nada sucedió, sus discípulos -que posteriormente fundarían la Iglesia Cristiana Adventista del Séptimo Día- aseguraron que en realidad, el Mesías había vuelto... pero sólo en espíritu. Parecida creencia sostuvo Charles Tazel Rusell, cuyos seguidores fundarían más tarde el grupo religioso Testigos de Jehová. Rusell demoró el terrible acontecimiento, primero hasta 1874, y después hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914. Pero él mismo murió en 1916 sin que se hubiera producido otro fin que el suyo propio. 

No hay que preocuparse. Tras los pronósticos fallidos, los profetas o sus seguidores afirman que en realidad no se anuncia el fin del mundo, sino un periodo de convulsiones y cambios de todo tipo que darán lugar al fin de nuestro mundo, tal como lo conocernos. Pero para eso no nos hacen falta adivinos. 

Los profetas ecológicos. 

Los profetas se frotan las manos cada vez que aparecen pronósticos sombríos sobre las temibles consecuencias de cualquier avance tecnológico, sea el agujero de ozono, el calentamiento global, la contaminación, la pérdida de la biodiversidad, los peligros de la energía nuclear -guerra atómica incluida-, la aplicación indiscriminada de la ingeniería gen ética. .. Y, por supuesto, el tantas veces traído y llevado Efecto 2000. 

El 2000 y las computadoras. 

Cuando lea estas líneas, ya habrá pasado más de un año desde la entrada en el año 2000. Y todos ya habremos experimentado las supuestamente catastróficas consecuencias del milenarismo moderno: el Y2K (Year 2000), capaz de paralizar los computadores del mundo entero. ¿Quién pudo creerse eso? Muchos. Así pudimos ver cómo una feria celebrada a finales del mes de septiembre de 1999 en la ciudad de Charlotte (Carolina del Norte) mostraba todo un arsenal de productos pensados para la pura y dura sobrevivencia. Y anuncios que pregonaban: "Pistolas y equipos que necesitarás para sobrevivir al Efecto 2000". Y otros: "Si tienes municiones, tendrás alimentos". No era para menos. Se hablaba de misiles nucleares que podrían salir disparados de sus silos, de centrales atómicas que fallarían dejando escapar mortífera radioactividad de bancos, hospitales, aeródromos y supermercados cuyos sistemas informáticos se volverían locos... 

En 1993, un caballero llamado Peter De Jager, escribió un artículo catastrofista titulado Doomsday. Dos años después creó una página en Internet -que llegó a tener hasta 800,000 visitantes al mes- para explicar el caos informático que se avecinaba, lo cual le valió ser llamado "El Profeta del Efecto 2000". Y todavía en 1999, el senador norteamericano Bennet, presidente del Comité Especial del Senado para el Problema Tecnológico del Año 2000, advirtió que los sectores menos r. preparados eran los de telecomunicaciones, el de salud y el"" del transporte aéreo. " ¿ Dónde pasará la Nochevieja?", le preguntó poco antes de finalizar el año un periodista a De Jager. "En un avión, -respondió-, volando de Chicago a Londres". Menos mal. Un profeta que rectificó a tiempo- 

Tu destino personal.

Bueno. De lo anterior se deduce que quizá profetizar el I futuro global de una nación o de una sociedad sea imposible. ¿Debido acaso a la complejidad resultante del gran número de personas implicadas? Si así fuera, ¿quizá sería más fácil predecir qué le sucederá a un individuo en concreto? Así lo creen muchos. Pues según afirmaba ya hace años el estudio del sociólogo Amando de Miguel, "en el conjunto de la población consultada, la mitad dice creer que el destino está escrito en alguna parte, sólo que no lo conocemos bien." Los cálculos indican que en España, por ejemplo, un país del llamado Primer Mundo, quizá haya unos 50,000 adivinos aunque ellos prefieren denominarse videntes, y un número incalculable de ellos en todo el mundo. Los métodos más populares son el tarot, la lectura de las rayas de la mano, de los posos del café o de la bola de cristal, si bien existen casi medio centenar de mancias o artes adivinatorias, algunas de ellas ciertamente originales, como las Bibliotecas del Destino mencionadas al principio. 

¿Se puede realmente adivinar el futuro? El error está implícito en la pregunta. No existe un futuro único y determinado, sino un abanico de futuros posibles que nuestras acciones crean a cada instante. Pero es que, además, si creemos en la adivinación, dejamos de creer en la libertad de cada individuo. Si, hagamos lo que hagamos, el futuro ya está escrito, ¿qué importaría actuar de una u otra forma? Claro que tampoco vale la pena preocuparse, pues hasta los videntes dicen no creer en la inexorabilidad del destino e invocan una de las frases predilectas de la astrología, que también se podría aplicar a cualquier otra forma de adivinación: "Las estrellas inclinan, pero no obligan". De modo que volvemos a estar como al principio. 

Los adivinos y la Ciencia. 

Durante muchos siglos, las supuestas capacidades de los videntes, adivinos o profetas provenían directamente de la divinidad. El siglo pasado apareció la llamada ciencia de la parapsicología, y sus estudiosos bautizaron la videncia con el nombre de precognición, palabra que pese a su aparente carácter científico tampoco explica nada sobre sus causas. Para conseguir la necesaria respetabilidad, entre 1928 y 1950 un psicólogo llamado Joseph Banks Rhine comenzó a realizar pruebas de laboratorio en la Universidad de Duke (Carolina del Norte, EE.UU.) Sus investigaciones afirmaron que sí era posible adivinar el futuro. Pero los científicos que han tratado de reproducir sus trabajos, estableciendo los protocolos adecuados y siendo muy cuidadosos, no han encontrado resultados significativos. 
Incluso el famoso físico Stephen Hawking, que en su juventud se interesó por este tipo de cosas, se encontró con esta realidad inexorable: "Muchas veces hallamos únicamente lo que deseamos encontrar". Paradójicamente, la ciencia suele ser invocada a menudo por los parapsicólogos y videntes. "Uno podría esperar -puede leerse en una enciclopedia sobre parapsicología- que fenómenos como la telepatía, la clarividencia o la precognición encontrarían ubicación en un cuerpo de teorías RC (realidad clarividente) análogo alas teorías de la relatividad y la mecánica cuántica. En el mundo de lo paranormal, la capacidad de un sensitivo para adquirir información parece independiente de los intervalos de distancia o de tiempo". 

Pues lástima, pero pese a la desesperada necesidad de encontrar puntos de apoyo, ni la relatividad ni la mecánica cuántica parecen representar una base suficiente para dar carta de verosimilitud a supuestas capacidades adivinatorias. El mismo Hawking engloba todos estos fenómenos bajo el breve y despectivo epígrafe de "toda esa basura de moda". Del mismo modo, el excepcionalmente benévolo Albert Einstein confesaba su escepticismo "con respecto a todas estas creencias y teorías", pues le parecía extremadamente raro justamente esa característica: que los fenómenos descritos pudieran ser independientes del espacio y del tiempo. 

¿Por qué los horóscopos son falsos? 

Cuando construimos un edificio, por bello que parezca, cimentado en lodo o paja, se va a derrumbar inevitablemente. Eso es lo que pasa con el mito de la Astrología, de la cual se deducen los horóscopos que vemos publicados en revistas, escuchamos en la radio y hasta son difundidos por televisión. 
El error fundamental de la Astrología radica en el concepto totalmente anticientífico de lo que son las Constelaciones. No por nada no hay ni un Astrónomo que sea Astrólogo. 

Desde siempre el hombre ha observado el cielo e intentado explicarlo. Ya los antiguos griegos sabían que la tierra era redonda y conocían la distancia y tamaño del Sol y de la Luna. Pura matemática, pura ciencia exacta. 

Pero otros, relacionando a las estrellas entre sí con una imaginación exhuberante, como cuando los niños ven figuras en las nubes, creyeron ver lo que conocemos por Constelaciones: Escorpión, Orión, las Osas Mayor y Menor, Sagitario, etc... Sin embargo, no todas las culturas vieron o imaginaron las mismas figuras, lo cual ya habla del error de aceptar las Constelaciones como tales. 

El problema científico radica en lo siguiente: 1o que vemos en una noche estrellada, como en un plano, es en realidad una simple ilusión de óptica. Las diversas estrellas de una constelación, digamos por ejemplo Orión, no tienen nada que ver entre sí, porque están a distancias muy diversas del planeta tierra o de nuestro sistema solar o hasta de nuestra Galaxia. Algunas ni siquiera son estrellas sino nebulosas o aún galaxias de millones de estrellas que vemos como un punto luminoso de tan lejos que están. 
Uno de los signos zodiacales, por ejemplo Escorpión, tiene una estrella supergigante, Antares, a una distancia de 600 años luz de la Tierra, pero otra de sus estrellas, la M7 dista 750 y la M6, 1900. O sea, no tienen ninguna relación entre sí. El concepto de Año Luz es muy útil es muy útil en Astronomía, pero se presta a una especie de engaño a nuestra mente, porque el manejar cifras como 600 o 1900, nos imaginamos distancias como si fueran kilómetros terrestres y en realidad, son distancias descomunales, inimaginables, "distancias astronómicas". Un Año Luz es la distancia que recorre la luz en un año a razón de 300,000 km. por segundo, lo que al final nos da un 93 seguido de doce ceros, es decir, 93 millones de millones de kilómetros. Para llegar en una nave espacial de la NASA a la estrella más cercana a la Tierra, la Alfa del Centauro, necesitaríamos nada menos que 1400 siglos y eso que está tan solo a 4.3 Años Luz. 

Debemos preguntarnos honestamente si algún cuerpo celeste, por grande que fuera, a una tal distancia, puede tener alguna influencia en nuestras vidas. 
Lo que es más, si creo que las diez o doce estrellas de una constelación -simple ilusión engañosa de óptica- se relacionan entre sí y además, se relacionan todas juntas con mi persona, y todavía complico la cosa con un planeta con respecto a nuestro mismo Sol, estoy armando un edificio tan absurdo y complicado como absolutamente falso. 

Hay sin embargo dos cuerpos celestes que de hecho sí influyen, no en cada persona o su destino, pero sí ciertamente en toda la humanidad que habita en la Tierra: el Sol y la Luna. El primero, para qué decirlo, dada la inclinación del eje de la tierra con respecto a la órbita en la que giramos alrededor del Sol, determina las estaciones y podemos padecer frío o calor. El Sol de invierno no calienta gran cosa que digamos. Y también, si nos exponemos a los rayos solares en verano, adquirimos un atractivo bronceado. No pasa de ahí. Pretender que en un solsticio, encaramados en una pirámide, nos llenamos de "energía" (sobretodo si llevamos un cinturón rojo) es simplemente una falacia, un sin sentido. 

La Luna, por su parte, aunque es muy pequeña, por estar tan cerca de la Tierra, (un segundo y pico en Años Luz) controla magnéticamente las mareas e inspira romances y canciones en no pocos terrícolas. Es comprensible. Pero ya los otros Planetas de nuestro sistema, están tan lejos, que su influencia magnética o de otra clase, es prácticamente nula. 

Evidentemente al partir de una teoría tan falsa -la existencia de constelaciones- todo lo demás carece de fundamento y veracidad. La prueba más fehaciente de todo esto es la incompatibilidad de los horóscopos. La tabla del 2 es válida aquí y en China, pero no hay dos horóscopos iguales para una misma persona. Regir la conducta a partir de uno de ellos, (¿con qué criterio escojo el "bueno"?) es capricho, ignorancia, inseguridad y error. 
Conclusión. 

Finalmente, debemos responder a la pregunta más importante: ¿aciertan los adivinos en sus visiones del futuro? La respuesta es sí. Igual que la gente normal y corriente, es decir, lo que sería de esperar debido al simple azar. ¿Y cuál es la forma más fácil de comprobar su ineficacia? Según la psicóloga Mercedes Quintana, miembro de la asociación escéptica ARP, "basta con que una misma persona acuda al consultorio de varios adivinos y coteje luego sus predicciones". La ARP (Alternativa Racional alas Pseudociencias) es una versión del CSICOP estadounidense (Comité para la investigación Científica de los Supuestos Fenómenos Paranormales), y tanto unos como otros han comprobado repetidamente la no validez de las pomposamente llamadas Artes Adivinatorias. 

Y es que ya lo decía la Biblia" "Si un profeta afirma que habla en nombre de Yahvé y su profecía no se cumple, es que Yahvé no ha dicho tal cosa". Amén. 

EL PASAPORTE Y LA VISA PARA LA VIDA ETERNA 

El principal elemento para el ingreso o salida de un i viajero de un País, es por supuesto, tener pasaporte, pero este no es suficiente, necesita además, la visa del país a donde va, pues sin ella no podrá entrar. Esta es una analogía sumamente importante para un católico cuando se dispone al "viaje sin retorno".

La Iglesia Católica nos extiende el pasaporte con el i agua del Bautismo, y lo revalidamos por tiempo indefinido, con el Sacramento de la Confirmación.

Pero al llegar a la "Jerusalén Celestial" se nos pedirá la "visa" y ésta solamente se puede adquirir con el total cumplimiento de la Ley de Dios, que es posible con la ayuda de los Sacramentos, el estudio y conocimiento de su Doctrina y la práctica de las Buenas Obras. 
En la EVC pensamos que la mejor de las Obras de Misericordia que podemos hacer en provecho de nuestro prójimo, es el ayudarlo en su Instrucción Religiosa.

Ayúdenos usted a la difusión de los Folletos EVC, pues es posible que la lectura de uno de ellos, sea la causa de que alguna alma se acerque a la Iglesia Católica, y consiga "pasaporte y visa".

¿Es válido el matrimonio cuando hay impotencia por parte de uno de los cónyuges?


Responde el P. Miguel Ángel Fuentes, I.V.E.

Pregunta:


¿Es válido un matrimonio en el que los cónyuges no pueden consumarlo, sabiéndolo de antemano? Por ejemplo: una mujer y un hombre que haya quedado paralítico accidentalmente y no pueda tener relaciones. No obstante, ellos deciden casarse igual.

Respuesta:

Estimado:


Le recuerdo que la impotencia de consumar el matrimonio es un impedimento tratado en el Código de Derecho Canónico, canon 1084.

Consiste en la imposibilidad de realizar la cópula carnal y la efusión del semen en la vagina de la mujer. Sin esto no hay posibilidad alguna de generar hijos.

Esta impotencia puede ser de orden físico, o bien puede responder a problemas psicológicos. A su vez, puede ser absoluta (no poder hacerlo con nadie) o relativa (no poder hacerlo con una persona determinada). También puede ser temporal o perpetua.

Ahora bien, hay que decir, que la impotencia que se considera impedimento matrimonial es la impotencia antecedente al matrimonio, perpetua, aunque sea relativa (al menos con esa persona no se puede casar). Este impedimento es de derecho natural; y esto quiere decir que no puede ser dispensado.

De todos modos, no hay que confundir impotencia (imposibilidad de copular) con imposibilidad de concebir (infecundidad), aunque se trate de infecundidad por esterilización o vasectomía. El caso de la vasectomía es más delicado porque lo que se deposita en la vagina de la mujer no es semen verdadero sino líquido seminal; sin embargo, la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe respondió, el 13 de mayo de 1977 que esto no constituía propiamente impedimento de impotencia.


VIERNES SANTO ¿QUÉ CELEBRAMOS ESTE DÍA?



¿Qué celebramos los católicos el VIERNES SANTO?

En este día la Iglesia celebra la gloriosa Pasión de Jesús, Su Muerte victoriosa. Destaca como símbolo de salvación la Cruz del señor.

El Señor está firmemente clavado en la Cruz. Había esperado muchos años y en aquel día se cumplía un deseo de redimir a los hombres. Lo que había sido un instrumento infame y deshonroso, se convertía en el árbol de la vida y escalera de la Gloria. Una honda alegría le llenaba el extender los brazos sobre la Cruz, para que supiéramos los hombres que así tendría siempre los brazos para los pecadores que se acercaran a Él: abiertos.

Liturgia y Tradición de la Iglesia

Según una antiquísima tradición, la Iglesia no celebra los sacramentos en este día ni el siguiente. El altar debe estar desnudo por completo: sin cruz, sin candelabros, sin manteles.

Ayuno y abstinencia se incluyen como precepto a obedecer, como lo dice el Código de Derecho Canónico en el número 1251, 1252 y 1253, en el cual los días de guardar ayuno y abstinencia son el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. Las edades son de 14 a 59 años.

El ornamento sacerdotal para esta solemnidad es color rojo.

La primera parte es la Liturgia de la Palabra y la Oración Universal. Se lee la Pasión del Señor según el Evangelio de San Juan.

La segunda parte es la Adoración de la Cruz: el leño del Calvario no es sólo un suplicio, sino sobre todo la cruz exaltada. El celebrante, los ministros y los fieles van a postrarse sucesivamente delante del crucifijo en señal de adoración de Cristo, triunfante por la Cruz.

La tercera parte es la Sagrada Comunión se distribuye únicamente a los fieles dentro de la celebración de la Pasión del Señor; a los enfermos, que no pueden participar en dicha celebración, se les puede llevar a cualquier hora del día.

Devoción

El Vía Crucis es la devoción propagada sobre todo por los franciscanos a partir del s. XV y s. XVI; que consiste en recorrer un itinerario de representaciones, llamadas estaciones, de las etapas del camino que va del palacio de Pilato al Calvario, deteniéndose a meditar y a rezar en cada una de las estaciones. Otra devoción muy frecuente es el Sermón de las Siete Palabras.

Tradiciones Populares 

Se encuentra la Procesión del Silencio y la compañía de la virgen vestida de luto. Existen muchas tradiciones populares según el lugar y la inculturación. 

Tal vez una de las tradiciones populares que ha tomado mucha fuerza es la representación en vivo del Vía Crucis. Sin embargo, esta tradición no substituye la liturgia del Día, pues es un mandamiento de la Iglesia que todos debemos cumplir.

¿Pueden recibir la Sagrada Comunión los homosexuales?




Dios hizo a Adán y a Eva, no a Adán y a Steve.

Hace no mucho, concretamente el domingo de Pentecostés, la noticia de que el arzobispo de Sydney, George Pell, negó la Comunión a un grupo de activistas homosexuales y lesbianas declarados (miembros del movimiento Rainbow Sash), acaparó la atención de los medios de comunicación australianos.

A raíz de esto el prelado publicó un comunicado sobre el tema, mismo que se resume a continuación para entender mejor la postura de la Iglesia.

«Aunque acepto que haya personas que puedan tener un punto de vista sobre la adecuada expresión de su vida e identidad sexual que difiera de las enseñanzas de la Iglesia, rechazo profundamente que tales personas -que profesan la fe católica- escojan para montar una demostración ideológica la Misa, y especialmente el momento de la Comunión. Esto es inapropiado. Recibir el sacramento es la expresión última de nuestra fe católica, algo profundamente personal entre el que comulga y Dios Todopoderoso. Una comunión indigna, hecha a sabiendas, es un tema serio.

«No se trata de rechazar a los homosexuales o a quien tenga una orientación homosexual. La orientación sexual es moralmente irrelevante. La regla es básicamente la misma para todos los católicos.

«Una persona que públicamente se define a sí misma, en un momento dado, apoyando o practicando actividades contrarias a la enseñanza de la Iglesia en materias serias no tiene derecho a recibir la Sagrada Comunión. Esto se aplicaría, por ejemplo, a la persona casada que viviera abiertamente o defendiera el adulterio. Del mismo modo, las personas que declaran abiertamente que los homosexuales activos deberían ser capaces de recibir la Comunión toman una postura que es contraria a la enseñanza y disciplina de la Iglesia universal.

«Una persona que no es miembro de la Iglesia católica no tiene derecho a la Comunión católica, salvo en circunstancias excepcionales.

«He explicado muchas veces con anterioridad cuál es el punto de vista de la Iglesia sobre la sexualidad. Es claro e inequívoco, y deriva de la ley moral natural, que consideramos inmutable. Esta ley moral gobierna a todas las personas de cualquier parte, de la misma forma, sean cuales sean las circunstancias en las que vivan. Dios hizo a Adán y Eva, no a Adán y Steve, y de esto se derivan importantes consecuencias.

«Nuestra tradición religiosa judeo-cristiana permite que hombres y mujeres se expresen sexualmente dentro de los límites de la vida familiar, una sexualidad que es dar vida. Los actos homosexuales son contrarios a la ley natural; cierran el acto sexual al don de la vida. Estas enseñanzas vienen dadas desde nuestro punto de vista cristiano.

«Aunque la debilidad humana es universal y la misericordia de Dios infinita, el camino hacia la felicidad y hacia el Cielo para un católico no puede falsearse buscando reinterpretar lo que está bien y lo que está mal. Más bien, se debería confiar, de buena fe, en la Iglesia y en sus enseñanzas y buscar seguir estas enseñanzas de la mejor manera posible».

(Fuente: ZENIT.ORG)


¿SE OPONE LA BIBLIA A GUARDAR EL SABADO?


Me hicieron esta pregunta, sobre el Sabado que creo es interesante responder, para aclarar la Verdadera doctrina:

1) Exodo 35.2 : "Durante seis dias se trabajara, pero el septimo dia sera para ustedes una cosa sagrada, un dia de descanso solemne en honor al Senor. El que trabaje ese dia sera castigado con la muerte."

2) Levitico 25.44: "Los esclavos y esclavas que ustedes tengan provendran de las naciones vecinas: solamente de ellas podran adquirirlos."

Ahora mis dudas..

1) No entiendo por que existe esto (El significado) en la Biblia si luego en Romanos 14 (si no me equivoco) y tambien hasta Jesus dicen luego, que NO esta mal. Menos comprendo como dicha accion esta penada con la MUERTE ?!.....

2) Bueno, aqui si que estoy desconcertado. Que significa TODO esto?

El sabado era solamente para el pueblo de Israel es por eso que en el NT Pablo ya no lo contempla porque se rige por la Ley de Cristo y no la ley de Moises de todas formas veamoslo detalladamente:

1Convocó Moisés la asamblea de todo Israel, y les dijo: "He aquí lo que Yahvé ha mandado hacer: 2Seis días trabajaréis, pero el séptimo será para vosotros santo, día de descanso, consagrado a Yahvé. El que en ese día haga un trabajo cualquiera, será castigado con la muerte.Exodo 35:1-2

El precepto sabático tenía tal importancia en Israel, que le hallamos con frecuencia repetido en la Ley. Parece que aquí (v.2) el autor sagrado entrevé una época de intenso trabajo para la fabricación del santuario, y, temiendo que alguien crea que lo santo de la obra excusa la observación del sábado, lo vuelve a promulgar aquí, amenazando con la pena capital a quien lo quebrante.

Ex. 31:16-17 "Los israelitas guardarán el sábado celebrándolo de generación en generación como alianza perpetua. Será entre yo y los israelitas una señal perpetua; pues en seis días hizo Yahvé los cielos y la tierra, y el día séptimo descansó y tomó respiro."

¿Notaste que el sábado es referido como una señal que Ligaba a Dios ya los israelitas no a Dios y al resto del mundo?

La Antigua Alianza, y con ella el "sabad" fueron hechos obsoletos por la Nueva Alianza. La anterior fue consumada y remplazada por la Ley de Cristo y el día de nuestro Señor:

Ef. 2:15 "anulando en su carne la Ley de los mandamientos con sus preceptos, para crear en sí mismo, de los dos, un solo Hombre Nuevo, haciendo la paz".

Ahora veamos lo del Levitico:

Los esclavos o esclavas que tengas, tomadlos de las gentes que están en derredor vuestro; de ellos compraréis siervos y siervas. 45También podréis comprar de entre los hijos de los extranjeros que viven con vosotros y de entre los que de su linaje han nacido en medio de vosotros, y serán propiedad vuestra. Levitico 25:44-45

En caso de que algún deudor no pueda responder de su deuda y tenga que ofrecer su persona al prestamista, se pide a éste que no le trate con dureza y no le considere como esclavo, sino como mercenario. En el código de la alianza se ordena dar libertad a los esclavos hebreos después de seis años de servicio. En Dt 15:13-14 se ordena que el dueño debe dar al esclavo que sale de su dominio parte de sus bienes que Dios le ha otorgado, de forma que el esclavo no quedase sin defensa ante la vida. La ley del jubileo trata de facilitarle la vuelta a recuperar sus propiedades (v.41). En la legislación babilónica se prevé el caso de un esclavo-babilonio de un extranjero que es rescatado por dinero del templo o del palacio real. En la legislación levítica se permite la esclavitud de extranjeros (v.44). Su dueño puede ser propfétáfip perpetuo, sin que para los extranjeros tenga lugar la'liberación del año jubilar (v.46). En el caso de un israelita que es esclavo de un extranjero, siempre hay opción al rescate (y.4. El precio de rescate será en proporción a los años que falten para el año jubilar (v.50). En todo caso, el israelita tendrá categoría de mercenario y no de esclavo hasta que sea liberado en el año jubilar, si no le rescatan antes.

Como otras leyes ideales, esta de la liberación del esclavo parece que apenas tuvo aceptación en la práctica. Jeremías echa en cara a sus conciudadanos el que no hayan liberado a los esclavos, como habían prometido, y él habla de haber rescatado un campo a uno de sus parientes. Con todo, en la práctica estos esquemas legislativos han resultado demasiado elevados y humanitarios para el egoísmo de los potentados israelitas.

¡Dios les Bendiga!

sábado, 27 de diciembre de 2014

¿Cuáles son las religiones de Iran?



Por E. Ripoll Perelló F. Martí Jusmet

Tomado de la gran Enciclopedia Rialp 

Pregunta:

¿Cuáles son las religiones de Iran? 

Respuesta: 

Las principales corrientes y concepciones religiosas desarrolladas en I. son ampliamente tratadas en diversos artículos, a los que se remite. Por tanto, bastará dar aquí una breve visión de conjunto. Los primeros pasos de la religión irania están estrechamente emparentados con los de la India. En ambos casos se da un tronco indoeuropeo común (V. INDIA VI; VEDAS), pero paulatinamente la religión irania se fue apartando de la india, pues el panteísmo persa tenderá a colocar en lugar preeminente el mundo y la vida, mientras que el panteísmo indio tenderá a lo contrario. Se pueden rastrear en el grupo medopersa tres religiones: la del monarca, la del pueblo y la de los magos. De la primera nos ofrecen datos las inscripciones, y sabemos que colocaba a la cabeza del Universo a Ahura-Mazdáh. De la religión del pueblo tenemos noticia a través de Heródoto; adoraba cuatro elementos: la luz, el agua, la tierra y el viento; la luz se dividía en dos órdenes: luz de día (Sol) y luz de noche (Luna). El pueblo solía practicar el sacrificio de animales ante un mago que daba al acto un carácter oficial; los magos, según Heródoto, constituían una tribu que formaba parte de la confederación de los medos; de sus creencias casi no queda otro testimonio que los gatha o himnos presentes en el texto del Avesta. Durante la dinastía Arsácida adquiere importancia el culto de Mitra (v.). Artajerjes II lo hace figurar junto a Anahita en los monumentos; en el siglo I a. C. la religión de Mitra invadirá Europa después de las campañas orientales romanas. Esta religión se formó en Asia Menor (v.) y Mesopotamia (v.) y, por tanto, no es del todo persa, pero adquirió en I. una gran importancia. Los fieles de Mitra establecían santuarios cerca de donde brotaba una fuente; en el ábside del santuario se representaba a Mitra tauróctono (V. TOROS I). Mitra mataba a la bestia por una orden dada por el Sol y transmitida por el cuervo; del cuerpo del toro brotaban todos los vegetales. Al parecer existían siete grados de iniciación; para pasar de un grado al siguiente había que superar ciertas pruebas (v. INICIACIóN, RITOS DE). Los grados se llamaban: cuervo, cryphius, miles, león, Perso, heliodromus y pater. Los iniciados creían que les estaba reservada una inmortalidad gloriosa; esto, unido al alto valor de su moral, contribuyó a que la difusión del culto de Mitra, especialmente en el mundo militar, fuese muy grande. El principal documento que explica la antigua religión persa en el Zend Avesta (v.) en el que se halla la revelación de Zoroastro (v.) (s. vii a. C.). Éste, partiendo de principios iranios tradicimnales, constituye todo un sistema basado en la existencia en el mundo de dos poderes en guerra: el poder del dios de la luz y de la vida y el poder del mal, de la oscuridad y de la muerte (v. DUALISMO). A la cabeza del poder del bien está Mazda u Ormuz, y a la del poder del mal está Ahrimán; el primero creó el espíritu del hombre y el segundo su cuerpo. Todos los demás dioses no malignos están por debajo de Ormuz; tenemos entre ellos y Anahita y a Mitra. Dos herejías del zoroastrismo tuvieron gran importancia en l.: la de Mani o Manes, fundador del maniqueísmo (v.), y la de Mazdek, de gran repercusión políticosocial (V. MAZDENMO). Con los Sasánidas se va introduciendo en I. el cristianismo (v. vIII) y el budismo (v.), aun cuando siempre conservó gran importancia y difusión la doctrina de Zoroastro (V. PARSISMO). Posteriormente se verificará la definitiva irrupción de la religión mahometana (v. vi; ISLAMISMO; SI` A). V.t.: IX; ZOROASTRO Y ZOROASTRISMO; PARSISMO; MAZDEÍSMO; MANIQUEÍSMO; DUALISMO; GNOSTICISMO 11.

Dote



Dote de matrimonio en el A.T. El novio debía pagar a la familia de la novia una indemnización por ella. Podía ser en dinero o en servicios. Jacob: «Te serviré siete años por Raquel» (Génesis 29,18). Esta práctica queda superada cuando se comprende la enseñanza de Cristo sobre la dignidad de la mujer y el sacramento del matrimonio. Aun se utiliza en algunos países. 

En la vida religiosa: El patrimonio que se entrega al convento o a la orden en que va a tomar estado religioso una profesa. Esta práctica ayudaba al mantenimiento de la comunidad. Habían comunidades que recibían vocaciones que no tenían dote. Esta práctica ya no se utiliza en la Iglesia. 

En Teología: Claridad, agilidad, sutileza e impasibilidad. Estas son las cuatro cualidades que poseen los cuerpos gloriosos de los bienaventurados en el cielo.

PADRES DE LA IGLESIA: ¿QUIÉNES SON LOS...?




La palabra padre se aplicaba al maestro y los maestros se consideraban como padres de sus alumnos. El oficio de enseñar incumbía al obispo y se hizo extensivo a los escritores eclesiásticos siempre que fueran reconocidos como representantes de la tradición de la Iglesia.


Hoy se consideran Padres de la Iglesia los que reúnen las siguientes condiciones: ortodoxia de doctrina, santidad de vida, aprobación eclesiástica y antigüedad. Cuando estos Padres hablan de doctrinas, hablan de ellas como de doctrinas universalmente admitidas. Nosotros aceptamos lo que ellos enseñan porque dan testimonio de que en su tiempo las profesaban todos los cristianos, en todas partes. Nunca hablan de sus opiniones personales.

Son estos Padres, escritores cristianos del siglo I o principios del II cuyas enseñanzas pueden considerarse como eco bastante directo de la predicación de los Apóstoles a quienes conocieron personalmente. Se les da mucha importancia por considerar la Tradición como fuente de la fe.